25/7/09

Madeline von Foerster, abarcar el infinito


• Madeline von Foerster
• Nació en San Francisco en 1975, afirma que las mayores influencias sobre su identidad vienen de las raíces Alemanas, Austriacas, y Rusas de su familia.


• Estudió en la escuela de bellas artes en Mannheim, (Alemania), pero luego volvió a California a terminar sus estudios.
• lifornia a terminar sus estudios


• Las obras de Madeline parecen contagiarse a cada pincelada de los misterios que encierran la simbología oscura y el ocultismo, nos enseña plenamente en sus pinturas la vibración de los paisajes estériles de los surrealistas, y la claustrofobia del arte Medieval.

• Madeleine se confiesa una fiel admiradora de Jung y Caravaggio, y una sentimentalista de la era victoriana donde encuentra una belleza inherente del misterio y ve unas claras influencias en un libro de Hieronymous Bosch : El Bosco, que recibió como regalo a una muy temprana edad.

• En sus obras se puede ver tambien claramente influencias de los pintores flamencos, pero tambien de los surrealistas y otros como: Leonor Fini, Remedios Varo, Leonora Carrington, Hans Bellmer, y Ernst Fuchs.
• Madeline muchas veces es vista como una
• pintora "Neo Rafaelita".


• La técnica que realiza en sus trabajos muestra un esfuerzo por lograr el perfeccionismo, utilizando témpera, oléo y huevo.
• Algunas pinturas recuerdan a GIUSEPPE ARCIMBOLDO, sobre todo los retratos que destacan por el gran juego visual , trasladándonos por momentos a la sugerente época manierista italiana.
• Su obra llena de símbolos y colorido nos hace rememorar momentos históricos en el arte, pudiendo aunar con Madeline toda una mirada en la que pasado y presente forman parte y se apoyan, logrando con ello, que nuestra contemplación se sumerja a través de sus cuadros, en la esencia misma del arte.


• Para ver el mundo en un grano de arena, Y el Cielo en una flor silvestre, Abarca el infinito en la palma de tu mano Y la eternidad en una hora.
• Aquel que se liga a una alegría Hace esfumar el fluir de la vida; Aquél quien besa la joya cuando esta cruza su camino Vive en el amanecer de la eternidad.
Willian Blake




Soneto de la dulce queja
• Tengo miedo a perder la maravilla
• de tus ojos de estatua y el acento
• que me pone de noche en la mejilla
• la solitaria rosa de tu aliento.
• Tengo pena de ser en esta orilla
• tronco sin ramas, y lo que más siento
• es no tener la flor, pulpa o arcilla,
• para el gusano de mi sufrimiento.
• Si tú eres el tesoro oculto mío,
• si eres mi cruz y mi dolor mojado,
• si soy el perro de tu señorío,
• no me dejes perder lo que he ganado
• y decora las aguas de tu río
• con hojas de mi Otoño enajenado."
Federico García Lorca