Mirta Aguirre. Pensar en ella, en esta mujer escritora, cubana, revolucionaria, me transtorna la sangre.
Mirta Aguirre
* Porque sé que murió leyendo un libro en su butaca, porque cuando leo un poema suyo me tiembla todo, porque la admiro y leer a Mirta es aprender, es sucumbir ante una de las mejores escritoras que ha dado la literatura en el mundo.
Era fuerte, su lucha por los derechos de la mujer así lo exigía, pero la sensibilidad que demuestra en sus poemas, me hace pensar que una fragilidad extrema inundaba el mundo de Mirta.
Os dejo con uno de mis poemas favoritos de ella. En él, la desolación, la última esperanza pide a gritos, un no conformarse, que ella no quiere acostumbrarse y sé está acostumbrando... pide ayuda, aquí nos tiene, para la leerla las veces que haga falta.
Elegía II
* Yo me acostumbro, amor, yo me acostumbro.
* Yo me acostumbro a estar sin ti. ¿Lo entiendes?
* Quiere decir, amor, que no amanece;
* quiere decir que aprendo a abrir los ojos sin tu beso.
* Quiere decir que olvido, amor, que yo te olvido.
* Como un morirse lento, implacable, a pedazos,
* yo me acostumbro, amor, yo me acostumbro.
* Y acostumbrarse es una cosa oscura,
* es una cosa eterna, sin caminos,
* como un caer caer en el vacío.
* Yo me acostumbro, amor, yo me acostumbro.
* Y un día y otro pasan.
* Y un día triste no es día sino un cortejo inmenso.
* Y dos días de tristeza ya no pueden decirse.
* Y acostumbrarse es una palabra irremediable
* que ojalá nunca sepas.
* Una criatura tiene su tamaño,
* tiene su borde estrecho, su medida.
* Y ha de haber para todos la tremenda alegría,
* esa infinita dicha que es un derecho humano.
* Ser feliz, amor mío, es como el aire, el agua,
* algo para la vida.
* Yo me acostumbro, amor, yo me acostumbro.
* Lejos, tu mano corta el pan para otra boca.
* Lejos, suenan tus pasos y como yo sé que suenan.
* Lejos, amor, muy lejos.
* Y allí, donde mi angustia está sin ecos,
* tú sonríes, tú eres,
* y no sabes, amor, con cuánta sangre,
* con qué amarga paciencia,
* con cuánta fuerza para ahogar, yo olvido,
* yo deshago mi sueño
* Mirta Aguirre nace en Cuba (1912-1980).
* Destacada poetisa y crítica, desde muy joven, se incorporó a las luchas revolucionarias.
* Ingresó en el Partido Comunista de Cuba en 1932, condición que mantuvo hasta su muerte. Especial dedicación brindó a las luchas por la emancipación de la mujer, en relación con la cual escribió diversas obras.
* Su labor docente, como profesora universitaria le valió recibir el título de Profesora de Mérito de La Universidad de La Habana.
* Además de diversos estudios literarios y de otra índole, publicó Juegos y otros poemas dedicado a los niños, y Ayer y Hoy.
Mirta Aguirre
* Porque sé que murió leyendo un libro en su butaca, porque cuando leo un poema suyo me tiembla todo, porque la admiro y leer a Mirta es aprender, es sucumbir ante una de las mejores escritoras que ha dado la literatura en el mundo.
Era fuerte, su lucha por los derechos de la mujer así lo exigía, pero la sensibilidad que demuestra en sus poemas, me hace pensar que una fragilidad extrema inundaba el mundo de Mirta.
Os dejo con uno de mis poemas favoritos de ella. En él, la desolación, la última esperanza pide a gritos, un no conformarse, que ella no quiere acostumbrarse y sé está acostumbrando... pide ayuda, aquí nos tiene, para la leerla las veces que haga falta.
Elegía II
* Yo me acostumbro, amor, yo me acostumbro.
* Yo me acostumbro a estar sin ti. ¿Lo entiendes?
* Quiere decir, amor, que no amanece;
* quiere decir que aprendo a abrir los ojos sin tu beso.
* Quiere decir que olvido, amor, que yo te olvido.
* Como un morirse lento, implacable, a pedazos,
* yo me acostumbro, amor, yo me acostumbro.
* Y acostumbrarse es una cosa oscura,
* es una cosa eterna, sin caminos,
* como un caer caer en el vacío.
* Yo me acostumbro, amor, yo me acostumbro.
* Y un día y otro pasan.
* Y un día triste no es día sino un cortejo inmenso.
* Y dos días de tristeza ya no pueden decirse.
* Y acostumbrarse es una palabra irremediable
* que ojalá nunca sepas.
* Una criatura tiene su tamaño,
* tiene su borde estrecho, su medida.
* Y ha de haber para todos la tremenda alegría,
* esa infinita dicha que es un derecho humano.
* Ser feliz, amor mío, es como el aire, el agua,
* algo para la vida.
* Yo me acostumbro, amor, yo me acostumbro.
* Lejos, tu mano corta el pan para otra boca.
* Lejos, suenan tus pasos y como yo sé que suenan.
* Lejos, amor, muy lejos.
* Y allí, donde mi angustia está sin ecos,
* tú sonríes, tú eres,
* y no sabes, amor, con cuánta sangre,
* con qué amarga paciencia,
* con cuánta fuerza para ahogar, yo olvido,
* yo deshago mi sueño
* Mirta Aguirre nace en Cuba (1912-1980).
* Destacada poetisa y crítica, desde muy joven, se incorporó a las luchas revolucionarias.
* Ingresó en el Partido Comunista de Cuba en 1932, condición que mantuvo hasta su muerte. Especial dedicación brindó a las luchas por la emancipación de la mujer, en relación con la cual escribió diversas obras.
* Su labor docente, como profesora universitaria le valió recibir el título de Profesora de Mérito de La Universidad de La Habana.
* Además de diversos estudios literarios y de otra índole, publicó Juegos y otros poemas dedicado a los niños, y Ayer y Hoy.
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